16 abr 2012

Las penas del pene ( II Parte)


– Entonces, ¿puedes fingir un orgasmo?

– Siiiii

– Me alegro por ti señorita, ahora, quiero verte fingir una erección.

Los tipos creemos que con que esté dura ya está bien, que basta con la verga para tocarle el corazón a una mujer *cuál corazón yo lo que quiero es culiar* lo tipos creemos que basta con chuparles las tetas, mojarnos los dedos, abrirles las patas antes que se vallan, metérsela toda y sacársela antes que nos vengamos, los tipos creemos y les creemos, por eso quizá, vale la pena no mentir tanto y de vez en cuando decirlo para dejar de creernos lo que  no somos.

– Hoy no estuvo tan rico, ¿Lo intentamos de  nuevo?

Unos griticos así bien cachonditos no requieren mayores esfuerzos histriónicos y no está de más ese gemido cuando viene el final y cierran los ojitos y te comen los labios y recuerdan redtube, maúllan lujuriosas y ya están vestidas de nuevo, a cualquiera le pueden meter gata por liebre, con algunos funciona, aunque algunas gatas desafinen.

 – ¿Gata yo?

 – No, que vá, comete tus wiskas  que al menos te pone el pelo bonito.

Algunas veces estamos tan calientes que está bien, eso no importa, ella dicen duro y ahí vas obediente, ella dicen más y tú aprietas un poco el culito, eres increíble, mienten y tu sonríes, nunca me habían hecho sentir así, gimen y ya te vienes, respiras, sudas, eres el mejor polvo que me he echado respondes y ella se lo cree, ternurita.

Toda mujer se merece un tipo que la vea todos los días como la primera vez que la vio sin calzoncitos.

Los tipos creemos que cogiendo mucho nos hacemos mejores polvos y eso no siempre es cierto, porque si de esas, muchas son pésimas faenas seguramente empezaran a vetar tu pito a varias entrepiernas a la redonda, que ese es otro miedo, las mujeres se cuentan todo y cuando digo todo me refiero a la más mínima pendejada que te dejara por el piso y no precisamente de tanto coger.

Del amor al odio solo hay un mal polvo.

Si eres un cabrón te jodes, tanto tiempo cayéndole bien a sus amigas para que después tengan que putearte, si eres pito-chico ellas lo sabrán y te verán con compasión, el sexo por compasión es malo y aburrido, para algunos es sexo y está bien, cualquier hueco es trinchera dicen y no faltara la golfa compasiva, si eres mal polvo tu vida sexual se va al carajo, así que más te vale, hablar poco, y hacer mucho.

O en su defecto usar bien la lengua *guiño, guiño*

El riesgo que tiene hacerlo rico es la  obligación implícita para no dejar de hacerlo así nunca y no me quejo *se queja* igual, abrir las piernas resulta más fácil que empujar el culo, una mujer rara vez queda mal ¿o sí? pero espera que su tipo se lo haga bien siempre, o al menos tan bien, como la última vez.

¿Ya llegamos al orgasmo? ¿Falta mucho? Tengo sed.

Da igual, si no estuvo tan rico, lo intentamos de  nuevo y  nos dejamos de mentiras.

Track